AUGUSTA, Georgia (AP) — Dos majors hicieron creer a Xander Schauffele que era capaz de ganarlos todos. Dos meses sin jugar al golf por una lesión en las costillas ponen esa convicción a prueba.

Schauffele es más que capaz de ganar el Masters . Prueba de ello es su putt para birdie en el hoyo 18 que le permitió ganar el Campeonato de la PGA el pasado mayo, seguido de un dominio supremo en condiciones difíciles en Royal Troon para ganar el Abierto Británico el pasado junio.

El chico que no podía ganar un torneo importante de repente estaba a medio camino hacia el Grand Slam de su carrera.

"Sé de lo que soy capaz cuando me siento bien, cuando no pienso en nada más que en meter la bola", dijo Schauffele el lunes en Augusta National. "Ha sido un proceso volver a eso. No tengo muchas repeticiones, pero tengo mucho que rescatar, logros previos que me ayudan a fortalecer la confianza".

A pesar de ser el último jugador en ganar un major, el californiano de 31 años se encuentra un poco apartado del radar en el Masters. La atención se centra en Scottie Scheffler, número uno del mundo y actual campeón del Masters, y en Rory McIlroy, quien ya ha ganado dos veces este año en el Players Championship y Pebble Beach, superando a Schauffele y ascendiendo al número dos del mundo.

sto se debe principalmente a su ausencia. Sufrió una distensión intercostal en una costilla, junto con un ligero desgarro en el cartílago, que lo dejó fuera de competición desde la primera carrera de la temporada en Kapalua hasta su regreso a Bay Hill.

En los tres torneos desde entonces, su mayor hazaña fue extender su racha a 60 cortes consecutivos, la más larga en el PGA Tour desde Tiger Woods hace unos 20 años.

Pero tomó tiempo y requirió paciencia.

Se requirió más paciencia durante el primer día completo de prácticas en el Masters. La lluvia nocturna y las tormentas que azotaron la zona permitieron que las puertas abrieran a las 8:00 a. m., pero el campo se cerró a las 11:30 a. m. y finalmente cerró por ese día.

“Estoy aquí desanimado, igual que el resto del campo, por no poder practicar hoy”, dijo.

Schauffele conoce esa sensación. Pasó dos meses sentado, viendo series sin parar, cenando con amigos a los que rara vez ve, viendo golf en televisión que casi nunca veía, todo menos jugar al golf.

Se culpó a sí mismo por no reconocer antes un problema potencial.

“Me sentí un poco poco profesional, irresponsable y triste. Luego me motivé. Luego me sentí triste de nuevo. Y finalmente me motivé”, dijo Schauffele. “Sabía que iba a volver a jugar, pero no sabía cuándo.

"Solo quiero salir a jugar al golf y competir al máximo nivel", dijo. "Y me lo arrebataron".

Pero no antes de cambiar el guion. Schauffele había jugado lo suficientemente bien, compitiendo en el Abierto Británico de 2018, el Masters de 2019 y 2021, y el Abierto de Estados Unidos de 2024, cuando abrió con un récord de 63 golpes en Los Angeles Country Club, como para empezar a cargar con el peso de estar entre los mejores sin un major.

Y luego, en un lapso de poco más de dos meses, estaba a medio camino del Grand Slam de su carrera.

"Me repetía una y otra vez que estaba lejos y que necesitaba mejorar mucho y todo eso", dijo. "Y, de hecho, estaba mucho más cerca de lo que pensaba".

¿Dónde está ahora? No es fácil responder dado el tiempo que lleva fuera. Scheffler conoce esa sensación. Se perdió el primer mes de la temporada mientras se recuperaba de una pequeña cirugía en la mano derecha, que se perforó con una copa de vino mientras hacía raviolis.

Scheffler no ha ganado al llegar al Masters por primera vez desde 2021. Se siente cerca, y terminar un golpe detrás en el Houston Open hace dos semanas lo valida.

La última participación de Schauffele fue en el Campeonato Valspar, donde estaba entre los favoritos al comienzo del fin de semana, pero se rezagó, terminó con fuerza y ​​empató en el puesto 12.º. Fue un progreso, al menos, llegar a un punto en el que se sintió un poco más libre con el swing y aceptó el resultado.

Ver la racha que Scheffler ha mantenido durante tres años y el renovado impulso de McIlroy tras su gran comienzo de año ha sido motivador. El Masters será la primera prueba real.

Está lleno de confianza en sí mismo (Schauffele creía que podía ganar el Grand Slam de su carrera incluso antes de jugar la ida) y dijo que necesita apoyarse en eso más que nunca.

"Han estado jugando un golf increíble", dijo Schauffele sobre los dos que lo superan en el ranking mundial. "Es lo que pasa cuando eres un jugador realmente bueno y sabes cómo manejar las cosas. Por suerte, pude hacerlo el año pasado. Y no hay razón para que no pueda volver a hacerlo".

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DOUG FERGUSONFerguson ha sido el escritor de golf de AP desde 1998. Es ganador del premio PGA Lifetime Achievement in Journalism.

(Foto AP/Julia Demaree Nikhinson)